Badera roja ante el autismo

Recientemente tuve la oportunidad de dar un seminario en Puerto Rico sobre el autismo. Una periodista para El Nuevo Dia redacto un artículo que fue publicado este lunes. El artículo, escrito por Josefina Barceló Jiménez empieza de la siguiente manera:

Pero, ¿qué es el autismo? ¿qué lo causa? ¿hay cura? ¿hay tratamientos? 

Recientemente, se celebró la actividad “Autismo en Puerto Rico: Uniendo Voces”, que consistió en un seminario y conversatorio sobre autismo, organizados por la doctora Amaya Miquelajáuregui, catedrática auxiliar del Instituto de Neurobiología del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, para fomentar el intercambio de ideas y la identificación de retos comunes de esta condición.

El orador principal, el doctor puertorriqueño, Manuel F. Casanova, profesor de Ciencias Biomédicas en la Escuela de Medicina Greenville, de la Universidad de Carolina del Sur  y actual presidente del Consorcio Internacional de Centros de Autismo, indica que el autismo es una condición del neurodesarrollo, donde el cerebro no funciona adecuadamente.

“El autismo puede ser causado por múltiples factores, y estos pueden originarse antes de que el bebé nazca o después de su nacimiento”, señala Casanova.

Según el experto, podría originarse en el embarazo, durante la formación del cerebro. Factores como la edad avanzada tanto del padre o de la madre, la exposición prenatal a la cocaína, infecciones de la madre como la rubéola o padecer citomegalovirus (tipo de virus del herpes), se relacionan con un mayor riesgo de que el hijo tenga autismo. Además, puede ocurrir  por desórdenes genéticos. Se ve en niños que nacen con el síndrome de Ehlers-Danlos (articulaciones sueltas o laxas, piel muy elástica en la que se forman hematomas y vasos sanguíneos que se dañan fácilmente) y en los que tienen el complejo de esclerosis tuberosa (enfermedad genética multisistémica que causa tumores benignos en el cerebro y en otros órganos vitales).

También, puede ser causado por factores después del nacimiento. Sufrir falta de oxígeno durante el parto, se asocia con un mayor riesgo de sufrir autismo. Los bebés prematuros, que tengan exposición a contaminantes ambientales, fiebres altas y convulsiones, entre otros, hacen más probable que un niño pueda padecer el TEA.

Sucede en el cerebro 
En el seminario, el doctor Casanova, quien ha desarrollado importantes investigaciones sobre anomalías cerebrales en pacientes con trastornos del lenguaje, incluyendo autismo, dislexia y síndrome de Asperger, explica que el borde exterior del cerebro —la corteza cerebral— tiene millones de estructuras celulares llamadas minicolumnas, que permiten el procesamiento de información.

“Las minicolumnas son ecosistemas de células especializadas (neuronas) que se repiten millones de veces a lo largo de la corteza cerebral. Dentro de las minicolumnas, en su centro, están las neuronas excitadoras y en su periferia (cerca al exterior), las neuronas inhibidoras”, dice. Algunas de las células inhibidoras mantienen una orientación geométrica perfecta, a unos 90 grados con respecto a la superficie de la corteza.

El doctor compara a las células inhibidoras como si formaran una “cortina de baño” que envuelve el centro de las minicolumnas donde residen las células excitatorias. “Las cortinas de baño mantienen el agua en el interior de la bañera; sin la cortina, el agua salpicaría y mojaría el baño”, explica.

De manera similar, un defecto en la envoltura inhibitoria de la minicolumna permitiría el escape de señales de una minicolumna a otras cercanas, procreando así una cascada de excitación.

“Nuestra investigación básica en TEA sugirió que la cortina de baño inhibitoria que rodea las minicolumnas, es defectuosa. Este hallazgo nos ha permitido explicar muchos de los síntomas observados en los TEA, incluyendo tanto los fenómenos sensoriales, como las convulsiones”, afirma.

Gran variedad de síntomas
Se le llama trastorno de espectro porque diferentes personas con TEA pueden tener una gran variedad de síntomas distintos. Algunos pueden tener problemas para hablar con otras personas, otros no miran a los ojos cuando les hablan. Hay quienes pueden tener intereses limitados, comportamientos repetitivos, pueden tener obsesión por el orden o un apego a un objeto. Pueden rechazar el contacto físico, tener incapacidad de interacción social o ausencia de capacidad imaginativa. Parecieran que están en su “propio mundo”.

Aquellos interesados en leer todo el texto del articulo lo pueden hacer utilizando el siguiente nexo electrónico: http://pordentro.pr/salud/1842/bandera-roja-ante-el-autismo/

autismo-1522686347-621x354

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.